Texas Papers on Latin America
Teresa Lozano Long Institute of Latin American Studies
Texas Papers on Latin America
Paper No. 97-01
La prensa latinoamericana en Internet:
una instantánea de los primeros años
por
Jaime Morfín*
jmorfin@mail.utexas.edu
University of Texas at Austin
1er borrador en circulación para comentarios
(17-Jun-97)
Introducción
Al igual que en otras partes del mundo, la prensa en América
Latina está sufriendo una nueva revolución tecnológica.
Las redes internacionales de computadoras que conforman Internet están
redefiniendo los esquemas tradicionales de hacer periodismo. La versatilidad
de los medios digitales brinda al editor enormes posibilidades de manejar
y distribuir la información más allá de los
límites
de tiempo y espacio de los que el papel dispone. Al igual que sus
contrapartes
en el resto del mundo, un creciente número de periódicos
en América Latina han tomado pasos decisivos en favor de una presencia
más activa en Internet. El crecimiento del número de
periódicos
que han visto en la Internet una nueva forma de hacer periodismo y alcanzar
nuevas audiencias ha sido extraordinario. Prácticamente, cada
país
en la región cuenta con un periódico en línea y en
Brasil, donde el crecimiento es mayor, el número llega hasta 30
o más publicaciones periódicas.
Este estudio pretende ser un primer acercamiento al análisis
de las razones, las formas y el alcance del periodismo electrónico
latinoamericano con miras a dar la pauta para futuras investigaciones.
A pesar de ser un fenómeno reciente, la cantidad de estudios sobre
la llamada prensa en línea o prensa digital es sorprendente (American
Society of Newspaper Editors, 1994; Dizard, 1994; Gordon, 1995; Hickey,
1995; Moeller, 1995; Morton, 1996; Reddick & Elliot, 1995, Straubha
ar & La Rose, 1996). Esta amplia bibliografía se enfoca sobre
todo al análisis de la prensa en Estados Unidos que, sin duda, merece
especial atención por ser punta de lanza en el desarrollo de Internet.
Sin embargo, el gran interés que los investigadores de la
comunicación
han dedicado al fenómeno contrasta con la poca o casi nula existencia
de estudios que se enfocan a la prensa en una región determinada
fuera de los Estados Unidos. De hecho, nuestra revisión
bibliográfica
arrojó la existencia de sólo unos cuantos trabajos sobre
la prensa latinoamericana en Internet (Font, 1996; Machado Gonçalves
y Silva Palácios, 1997; Wasibord, 1997). Creemos que el
fenómeno
merece la atención del comunicólogo interesado en
América
Latina no sólo porque Internet da a la prensa de la región
el acceso a nuevas audiencias antes inalcanzables, sino porque la
versatilidad
de los medios el ectrónicos ofrece formas novedosas de
participación
al lector y puede ser, incluso, una novel herramienta para el quehacer
periodítico.
Metodología
Ante el aún bajo aunque creciente número de
periódicos
en línea en América Latina (1), decidimos optar por la encuesta
directa como el método para recopilar información de primera
mano. El uso de la misma Internet fue esencial para alcanzar los objetivos
de la presente investigación. La primera etapa del proceso de encuesta
se enfocó a la definición de nuestro universo. La simple
tarea de recopilar las direcciones electrónicas de todos los diarios
latinoamericanos en línea fue en sí un quehacer laborioso
sobre todo por la ausencia de un directorio único actualizado. Con
el fin de mantener coherencia en la muestra, nuestro universo se
limitó
sólo a periódicos impresos de circulación diaria con
presencia en la World Wide Web (o Web). Por lo tanto, los semanarios,
las agencias cablegráficas y las publicaciones que aparecen
sólo
en Internet fueron excluidas (2).
La segunda etapa se orientó a recopilar
información cualitativa
directamente de los responsables del periódico en línea.
Con tal fin, un primer cuestionario fue enviado vía correo
electrónico
a los 110 periódicos que comprenden nuestro universo. Solicitamos
a los participantes que contestaran temas tales como los motivos de la
publicación en Web, las diferencias en contenido entre la
versión
en papel y la versión en línea, el uso de Internet al interior
del periódico y los planes a futuro. Como apoyo a los participantes,
colocamos en la Web información general sobre los objetivos de la
investigación, la institución y los investigadores. Aunque
el número de respuestas fue más bajo que el esperado
(sólo
12 diarios contestaron), el alto contenido de la información
proporcionada
fue esencial para dar forma y sentido a la información cuantitativa
recopilada en la última etapa de la investigación.
En la tercera y última etapa, un segundo cuestionario fue
enviado
al grupo original de 110 periódicos, aunque ahora con un nuevo
formato.
Con el fin de facilitar y agilizar su respuesta, el cuestionario fue colocado
en la Web para ser llenado en línea. Este formato, además
de facilitar el análisis estadístico de los resultados,
ahorró
tiempo a los participantes y, por lo tanto, incrementó a 21 el
número
de respuestas (19% de la muestra). Las preguntas se enfocaron a temas como
número, procedencia y comunicación con visitantes,
actualización
de la información, personal ocupado, potencial como negocio, junto
con otras preguntas técnicas.
Originalmente, la metodología fue diseñada de tal
forma
que el contenido del primer cuestionario sería complementado con
los resultados del segundo. Sin embargo, ante la disparidad en el
número
de respuestas a ambos cuestionarios, creemos que la información
estadística recopilada en la tercera etapa de la investigación
cuenta con mayor sustento metodológico e interés para el
lector. Con esta idea en mente, las cifras presentadas en este trabajo
se enfocan a establecer generalidades medibles entre los periódicos
de la región, con miras a tener una idea clara del fenómeno
y sugerir nuevas líneas de estudio. De cualquier forma, la
información
cualitativa recopilada durante la segunda etapa muestra los detalles que
la generalización del análisis estadístico esconde.
Por último, vale la pena aclarar que dentro de las
múltiples
variables que pueden afectar los resultados de un estudio como éste,
creemos que hay tres que vale la pena mencionar y que no fueron contemplados
en la presente investigación. A saber:
-
El bajo nivel de respuesta a ambos cuestionarios,
-
la disparidad en el tamaño de los periódicos participantes,
y,
-
la disparidad en la difusión de Internet en los países de
América Latina y en el interior de cada país.
Estas variables deben ser consideradas en futuras investigaciones. Sugerimos
al lector tomar en cuenta las limitaciones metodológicas del presente
estudio antes de sacar sus propias conclusiones.
Internet en la organización
periodística
Motivos de su adopción en Latinoamérica
¿Qué motivó a la prensa latinoamericana a
contar
con un escaparate electrónico en Internet? Aunque las respuestas
son variadas, tres ideas predominan: experimentación,
innovación
tecnológica y acercamiento a nuevas audiencias. Nuestra encuesta
muestra que, al igual que sus contrapartes en el resto del mundo, los
editores
de la prensa electrónica en América Latina ven al periodismo
del futuro asociado con su difusión en medios electrónicos.
En este sentido, Marcelo Pasetti, jefe de redacción de La
Capital
de Mar del Plata, comenta que su empresa no quiso ¨quedar fuera del
gran cambio que se está viviendo en el campo de las comunicaciones"
(comunicación personal, 1997). Asimismo, los editores latinoamericanos
de prensa reconocen la versatilidad que el nuevo medio les brinda. La
versatilidad
de los medios electrónicos le ofrece al editor en Internet una serie
de herramientas para captar el interés de los lectores que el editor
en papel no puede más que soñar. Las posibilidades van
más
allá de la adaptación del contenido a los intereses del lector.
En la Web, la forma de presentar la información es tan importante
como el contenido mismo. Interactividad, participación e
información
se combian en un solo espacio que miles de lectores comparten simultaneamete
y adaptan a su gusto, sin importar su localización geográfica.
A pesar de que el factor de innovación estuvo presente en las
respuestas a la encuesta, diversas interrogantes subsisten entre ellos.
¿Hacia dónde está evolucionando el periodismo
electrónico?
¿Cuál es la mejor forma de mantener el interés de
los lectores? ¿Existe entre la prensa en Internet un esquema
financieramente
viable? Estas son algunas de las preguntas que los editores latinoamericanos
comparten con sus cologas en todo el mundo. En respuesta, la prensa
latinoamericana
se ha lanzado a experimentar con el nuevo medio, convencidos de que "[.]
tal vez en diez años, la existencia de Internet obligue a un replanteo
general de la prensa tradicional" (Moreiro, 1997, comunicación
personal).
Queda claro que ante la ausencia de un modelo definido de periodismo en
Internet, no queda más alternativa que experimentar con miras a
buscar un modelo viable, tendiendo en mente objetivos a largo plazo.
En todos los casos la experimentación y la
inovación tecnológica
han ido de la mano. Contrario a la versión en papel, la versatilidad
del formato electrónico permite la inovación no sólo
en contenido y estilo de informar, sino también en la
presentación
misma del producto. Los modelos con los que la prensa latinoamericana ha
experimentado son variados y cambiantes. Conforme nuevas tecnologías
Web han ido apareciendo y evolucionando, la presencia de la prensa
latinoamericana
en Internet se ha ido tranformando. En algunos casos, por ejemplo, a
través
del uso de nuevas tecnologías en la Web se ha buscado sacar provecho
de la interactividad que el nuevo medio ofrece. Cha t Rooms o foros
de discusión electrónica, que permiten a los usuarios conversar
sobre los sucesos del día, han florecido en varios de los espacios
Web con miras a atraer al lector joven. En otros casos, los editores han
buscado experimentar con espacios de edición continua con la
intención
de atraer el interés del mercado empresarial. Otros han ido en
búsqueda
de nuevos lectores con el aumento del contenido de sus páginas,
ofreciendo al mismo tiempo herramientas de búsqueda para facilitar
la localización. En todos los casos, sin embargo, la
experimentación
en busca de nuevos lectores siempre ha ido de la mano de la evolución
de las nuevas tecnologías disponibles en Internet.
El tercer motivo, la atracción de nuevas audiencias, ha sido
sin duda la idea fundamental que ha fomentado la experimentación
en Internet y uno de los temas centrales en nuestra encuesta. El nuevo
medio permite que la distribución del periódico se desprenda
del papel y alcance receptores más allá del área de
distribución del periódico impreso. Por primera vez, la prensa
latinoamericana cuenta con un medio que le permite llegar al lector que
por la distancia estaba fuera de su área de acción. El lector
en el extranjero, por su parte, también por primera vez, cuenta
con una fuente de información al instante y con una perspectiva
local.
Para la mayoría de los encuestados alcanzar a las audiencias
"naturales", los conacionales en el exterior, es una de las razones
principales
que los llevó a mantener un espacio en Internet. Para Roberto
Ferrerira
JB Online "representa también una forma de permitir que
brasileños
en el exterior y extranjeros que dominan el portugués tengan acceso
a noticias sobre Brasil con rapidez y credibilidad" (1997,
comunicación
personal). En consecuencia, la respues ta de los latinoamericanos en el
exilio no se ha hecho esperar. El diario platense La Razón,
por ejemplo, recibe "mails de todas partes del mundo, especialmente
de argentinos que hace 10, 15 ó 20 años dejaron el país
y nos agradecen ser el nexo entre sus respectivos pasados y el presente."
(Moreiro, 1997, comunicación personal) (3).
Internet en la Empresa
El impacto de Internet en la organización periodística
no se reduce sólo a la diseminación de la información.
Las tareas diarias dentro de la empresa informativa han sido permeadas
por la nueva tecnología. En general, dichas empresas en América
Latina han sido influenciadas en dos maneras. Orgánicamente, a
través
de la creación de un equipo de especialistas encargados de la
edición
electrónica; funcionalmente, gracias a la incorporación de
Internet como herramienta de comunicación y fuente de
información.
El equipo Web
Cada uno de los periódicos latinoamericanos han
conformado un
equipo de trabajo para elaborar la versión en Web con base en el
interés de la casa editorial por su presencia en Web, el volumen
de la información manejada y la complejidad del espacio Web. El
número de integrantes del equipo Web va de un solo empleado, hasta
complejos equipos de hasta 30 personas. Es obvio pensar que el número
depende en gran medida del compromiso de la empresa editorial con el proyecto
en Web. O Globo On, por ejemplo, "considera importante invertir
en tecnologías que están surgiendo que pueden tener un impacto
en el periodismo" (Hara, 1997, comunicación personal). Consecuente
con la idea, la casa editorial mantiene un equipo de 14 personas encargadas
exclusivamente de la edición electrónica del diario.
El área de cómputo de la casa editorial es quien
en su
mayoría ha asumido la responsabilidad de la publicación en
línea. En la generalidad de los periódicos, las funciones
del equipo de cómputo se concreta a seleccionar y "subir"
(upload)
el contenido del día. Sólo en pocos casos el equipo de
técnicos
asume responsabilidades fuera de su área de acción. En otros
casos, sobre todo cuando el espacio Web ha crecido en tamaño y
complejidad,
la edición Internet está en manos de un equipo de periodistas
especializados los cuales se coordinan de manera similar a los equipos
de trabajo de la versión en papel. El equipo de El Universal
de México, por ejemplo, cuenta con responsables de sección
que seleccionan y procesan diariamente el material a incluir en la
edición
Internet. La función de los editores en este caso se limita
sólo
a resolver los "problemas editoriales y técnicos" (Fregoso, 1997,
comunicación personal).
Usos Periodísticos
La gran mayoría de los diarios han establecido como
política
interna proveer accesos y promover el uso de Internet. En algunos casos,
incluso, la organización ha hechado a andar una Intranet, "donde
los periodistas tienen acces o a notas y fotografías publicadas"
(Vega, 1997, comunicación personal). El grado de difusión
de la tecnología al interior de cada diario es tema para un estudio
más preciso. De cualquier forma, entre las diversas actividades
periodísticas a las que se refieren los encuestados, destacan tres
áreas en particular. Primera, el uso extensivo de correo
electrónico
para comunicarse al interior y fuera del periódico; segunda, el
aprovechamiento de la red como fuente de información y
verificación
de datos, y; tercera, el uso de la página Web como medio de
comunicación
directa y veloz con los lectores del diario. Sobre este tercer punto, cabe
comentar que la retroalimentación de los lectores no se queda
sólo
en las tradicionales cartas al editor. Ferreira de JB Online comenta
un caso en que, gracias a un mensaje de correo electrónico de una
lectora, la redacción del periódico cubrió en el momento
un enfrentamiento entre policías y habitantes de una favela.
La Presencia en Web
Alimentación
Aunque en promedio el 55% de la información que aparece
en la
versión en papel es reproducida por la versión
electrónica,
las cifras entre uno y otro periódicos encuestados varían
enormemente. Podemos hablar, en este caso, de dos grupos. En el primero
figuran el 35% del total de periódicos participantes que utilizan
la Web sólo para reproducir las notas más importantes y/o
la primera plana del diario. Con un volumen que va del 2 al 15% del total
reproducido en la versión en papel, las páginas Web de estos
periódicos son pobres, con un bajo nivel tecnológico y sin
mucha profundidad en el contenido.
En un segundo grupo se encuentran los periódicos que
reproducen
entre el 60% y el 100% de lo que el diario publica en papel. Tal volumen
de información se hace notar en sus espacios Web no sólo
en la diversidad de los temas, sino también en la complejidad de
la estructura y la riqueza del diseño. Aunque no parece haber una
correlación entre este segundo grupo y alguna de las otras variables
consideradas, sí podemos decir que el total de los periódicos
nacionales de gran tamaño que participaron en la encuesta se
encuentran
en este grupo. Es más, la encuesta muestra que sólo las grandes
empresas periodísticas cuentan con los recursos suficientes para
proveer a su espacio Web con contenido propio, ya sea a través de
espacios de edición continua o la inclusión de columnistas
exclusivos.
Edición Continua
La edición en línea permite a los
periódicos mantener
un constante flujo de información a través de actualizaciones
periódicas sin tener que depender de la impresión en papel.
Para la prensa diaria esto significa la redefinición del esquema
y la organización tradicional basada en "horas de corte", a un sistema
más fluido de recopilación, redacción, edición
y publicación de la nota informativa. Más que proveer al
lector con información una o dos veces al día, la flexibilidad
del formato electrónico permite al periódico ser una fuente
de actualización constante que, en disponibilidad y presencia, se
acerca más a la oferta informativa de la radio y la televisión.
El concepto de edición continua no es nuevo en América
Latina. Al contrario, muchas de las grandes empresas periodísticas
en la región proveen con un feed constante de
información
sobre temas nacionales a perióicos locales y regionales. Sin embargo,
lo que sí es nuevo es la posibilidad de brindar este servicio
directamente
al consumidor final de la información. Internet permite que la
diseminación
de las últimas noticias ya no dependa de otros medios o de la
disponibilidad
de boletines de agencias cablegráficas. Internet es para el
periódico
una herramienta poderosa que atrae al lector a través de la entrega
directa de información actualizada sin importar su localización
geográfica. Adicionalmente, las más recientes
tecnologías
como Fetch de Los Angeles Times o PointCast, permiten al usuario
seleccionar la fuente y el tema de la información de acuerdo con
sus necesidades.
Dentro de este rubro, nuestra encuesta muestra una fuerte
correlación
entre el tamaño del periódico y la frecuencia de las
actualizaciones.
De hecho, sólo un tercio de los periódicos encuestados
actualizan
la información una o más veces al día durante toda
la semana (Cuadro 1). En
todos los casos, el espacio en Internet forma parte de una importante empresa
periodística localizada en alguna de las grandes metrópolis
latinoamericanas. El 68.5% restante, todos ellos periódicos de menor
tamaño e influencia, no ofrecen actualizaciones de rutina a sus
lectores. Este grupo está formado por quienes nunca actualizan
(42.1%),
quienes lo hacen muy rara vez (5.3%) y quienes amplían la
información
sólo en ocasiones especiales (21.1%).
Aparentemente, para la prensa latinoamericana la posibilidad de
evolucionar
hacia un esquema de edición continua se ha visto limitado más
por la estructura tradicional de la organización periodística
y la disponibilidad de recursos financieros, que por la habilidad
técnica
de su personal. Sólo periódicos nacionales con cuantiosos
recursos humanos y financieros, han sido capaces de romper con el esquema
de informar una sola vez al día. Los métodos para mantener
la información al minuto varían dependiendo de los recursos
de cada empresa. En algunos casos, el equipo que elabora la versión
en línea cuenta con un pequeño grupo de periodistas encargados
de mante ner actualizada la información. Otros, como El
Universal
de México, obtiene de su vespertino información "fresca"
para su actualización vespertina. Pero de todos los esquemas, quienes
están en una mejor posición competitiva son aquellos que,
como Jornal do Brazil, cuentan con el servicio de cable entre otros.
Bajo este modelo, la organización de la empresa no cambia, sólo
se adapta el nuevo lector.
Las Audiencias
Como comentábamos antes, dentro de los motivos
principales que
llevaron a las casas editoriales a experimentar con la Internet está
el interés obvio por alcanzar nuevas audiencias en el extranjero.
Sin embargo, a dos años de la aparición de los primeros
diarios,
nuestra encuesta muestra un cambio del perfil hasta ahora tradicional del
lector de la prensa electrónica. Según nuestros
resultados(Cuadro
2), del 81% de los lectores conacionales de los periódicos
encuestados,
el porcentaje de aquellos que están en el país (45.5%) es
más alto de los que están en el extranjero (34.9%). Aunque
en términos porcentuales la diferencia es mínima, ante el
bajo nivel de difusión de Internet en la región, la diferencia
es considerable.
Sin embargo, esta cifra no es consistente en cada caso
específico.
En sí, el resultado de la encuesta muestra que también existe
una alta correlación entre el número de visitantes dentro
del país y el tamaño del periódico en cuestión.
Nuevamente, sólo los grandes diarios nacionales publicados en las
grandes metrópolis latinoamericanas reportaron que más de
dos tercios de sus lectores están localizados en su país.
La misma constante apareció en periódicos localizados en
países con un alto nivel de penetración de Internet como
Brasil (Diario Online, A Tarde, JB Online y O Globo
On) y México (El Universal). Puesto de otra forma, no
es la prensa electrónica en general la que está teniendo
una amplia atención de usuarios latinoamericanos, sino sólo
los periódicos de mayor tamaño localizados en zonas urbanas
donde hay una mayor densidad de líneas telefónicas, el
porcentaje
de la población con acceso a una computadora es mayor y donde los
grandes periódicos gozan de una cómoda posición en
el mercado.
Tomando en cuenta lo anterior, no es sorprendente que para la prensa
de menor tamaño, los conacionales en el extranjero siguen siendo
sus visitantes más frecuentes. Los porcentajes de lectores
conacionales
en el exterior reportados por pe riódicos de menor tamaño
van desde un 60% (El Siglo de Panamá), un 75% (Heraldo
de Chihuahua), hasta un 90% (El Comercio de Quito y El Sur
de Campeche).
¿En qué región del mundo están
localizados
los usuarios en el extranjero? 75% en Estados Unidos y Canadá, 15%
en Europa y 10% en América Latina (Cuadro
3). Estas cifras responden nuevamente al alto número de
conacionales
en el extranjero que mantienen contacto con sus países a través
de la prensa en línea. No es casual que los lectores estén
en países que tradicionalmente han sido receptores de migrantes
latinoamericanos, con Estados Unidos a la cabeza. España y
Japón
(países también mencionados frecuentemente en nuestra encuesta)
han sido receptores de migraciones argentinas y brasileñas
respectivamente.
Suponemos que el porcentaje reducido de usuarios latinoamericanos responde
sobre todo a la baja capacidad de conexión a la red que existe en
la región. Asimismo, es lógico pensar que el grado de
difusión
de Internet en las distintas partes del mundo, defina también la
procedencia de los visitantes extranjeros.
Financiamiento y Potencial Económico
Probablemente el principal obstáculo que la prensa en
línea
en América Latina tiene que afrontar, es su viabilidad financiera.
Las versiones electrónicas de los diarios encuestados siguen siendo
proyectos subsidiados por la empresa que lo respalda; los pocos que han
buscado opciones de financiamiento a través de suscripciones o
publicidad
en línea, cuentan con muy pocas entradas monetarias (Cuadro
4). A pesar de que el 40% de los encuestados prefirieron no contestar
nuestra pregunta sobre la viabilidad financiera del proyecto en Internet,
la información disponible muestra que hoy por hoy los proyectos
distan de ser financieramente viables. De hecho, el 90% de los participantes
que sí contestaron reconocen que los proyectos son financiados con
fondos de la casa editorial. Sólo algunos cuentan con entradas propias
a través de suscripción pagada y publicidad en línea.
La falta de viabilidad económica de los espacios Web no
es un
problema exclusivo de América Latina. Después de varios
años
de subsidio, empresas estadounidenses de la envergadura del Washington
Post y ABC News han decidido en fechas recientes retirar su
participación en proyectos de gran popularidad en Internet como
lo son Politics Now y Out.com por su poca viabilidad financiera
(Shiezel, 1997). Ni la publicidad, ni las suscripciones han sido la
solución
para levantar varios de los programas más influyentes de la Internet.
Tomando en cuenta lo anterior, ¿qué perspectiva
financiera
tiene la prensa electrónica en América Latina donde el
número
de usuarios de Internet es infinitamente menor que en los países
desarrollados? ¿Es factible cre ar un modelo financieramente viable
cuando casi la mitad de los lectores están en el extranjero?
¿Será
posible lograr ganancias una vez que Internet alcance una masa crítica
en América Latina? ¿Cuál será el modelo a seguir
entonces? Cualesquiera que sean las respuestas a estas interrogantes, la
encuesta muestra cierto optimismo entre los editores de América
Latina (Cuadro 5).
De hecho, del total de periódicos que respondieron a nuestra pregunta
sobre el potencial financiero del proyecto, el 50% de ellos cuenta ya o
espera ganancias en un futuro inmediato, mientras sólo un 10% asegura
que no es su propósito hacer dinero de sus páginas Web.
Conclusión
La experimentación y la constante incorpoación de
nuevas
tecnologías en Internet no permiten que exista en América
Latina (ni en ninguna otra parte del mundo) un modelo único de
periodismo
en línea. Las diferencias en estilo, contenido, innovación
tecnológica, cobertura, motivos y recursos hacen difícil
la generalización a lo largo y ancho de la región. Al igual
que sus antecesores en papel, los periódicos en línea respoden
a la lógica que el proceso de evolución del periodismo les
impone en cada uno de los países. En Internet, sin embargo, todos
están sujetos a los vaivenes de un medio cambiante y altamente
competitivo.
Entre los principales retos que la edición en Internet impone
a la organización periodística en América Latina
está
la incorpación de nuevas formas de trabajo. Los periódicos
que han reconocido las posibilidades en materia de interactividad con el
lector, versatilidad en la presentación y oferta informativa que
la Web ofrece, son quienes han obtenido los mayores beneficios de su
presencia
en Internet. Para los más innovadores, la publicación del
periódico en Internet no se reduce sólo a colocar las
principales
notas de día. El medio exige inventiva, experimentación y
cambio que se hacen notar no sólo en lo que el lector recibe en
su pantalla sino sobre todo en la forma de hacer periodismo. Nuevamente,
los periódicos latinoamericanos que en estos primeros años
han sabido acoplar sus estructuras y su estilo, son quienes están
en una mejor posición para sacar provecho de la edición en
Web.
No es casual que las grandes casas editoriales de la
región hayan
sido las primeras en contar con un espacio en Internet. En este sentido,
Waisbord comenta que son las empresas con más recursos
económicos
quienes cuentan con las posibilidades de sacar provecho de las nuevas
tecnologías
y "explorar" nuevas formas de hacer noticias (Waisboard, 1997). Las
diferencias
diamterales entre los proyectos Web de las casas editoras de gran
tamaño,
por un lado, y la prensa median a y pequeña, por el otro, confirman
esta idea.
A pesar de estas diferencias, después de algunos años
de experimentación, los editores latinoamericanos en general ven
con optimismo su presencia en Internet. El constante creciminento del
número
de periódicos en línea, la permanencia y la ampliación
de un gran número de espacios Web y el optimismo de los editores
en lo que a viabilidad económica se refiere, muestran que la
mayoría
de los periódicos ven con buenos ojos a la prensa en línea.
Este optimismo, sin embargo, puede no ser permamente. La
principal fuente
de financiamiento de los espacios periódisticos más populares
de Internet proviene de la publicidad que, a su vez, depende de un alto
número de visitantes. A pesar del rápido crecimiento de
Internet
en América Latina, y el consecuente incremento de lectores, es poco
probable que a mediano plazo los espacios en Web de la prensa latinoamericana
cuenten con el volumen suficiente de lectores para garantizar su permanencia.
Entonces, ¿cuál puede ser el modelo financiero a seguir?
Es difícil saber porque tampoco la publicidad ha mostrado ser ni
la única, ni la más viable opción de financiamiento
de espacios Web comerciales. Nuevamente, en este aspecto, la
experimentación
está presente en todo momento.
Es un hecho, sin embargo, que conforme el espacio en Web cuente con
un mayor número de lectores locales, mejores serán las
perspectivas
de lograr el volumen necesario para optar por la publicidad como
opción
de financiamiento. En este sentido, el creciente número de lectores
locales reportados en nuestra encuesta puede ser causa que motive aún
más el optimismo de los editores. En los países donde existe
una amplia difusión de Internet (Brasil, México y Argentina,
principalmente), el periódico en línea latinoamericano
está
dejando de ser sólo un vínculo entre los conacionales en
el exterior y su tierra natal. El incremento proporcional de las audiencias
en la ciudad o país donde se edita la versión en papel, abre
enormes posibilidades e interrogantes para los editores y para los
investigadores
interesados en el tema. ¿En qué medida compiten la
versión
impresa y electrónica por el mismo gr upo de lectores? ¿Es
factible desarrollar un modelo donde ambas versiones se complementen?
¿Deben
variar los contenidos o la forma de presentar la información con
el fin de atraer un tipo particular de lectores?
La difusión de Internet en el periodismo de
América Latina
trae consigo estas y otras muchas preguntas para que sean consideradas
por otros investigadores. El impacto de la digitalización de la
información en América Latina va más allá de
lo que entendemos hoy como periodismo. El análisis del fenómeno
en los primeros años de su existencia es importante para comprender
cuáles serán sus implicaciones a futuro. Este es el objetivo
primordial del presente trabajo. Queda en manos de futuras investigaciones
el promover el estudio del fenómeno Internet en América Latina
que,
con un enfoque multidisciplinario, vayan más allá de lo
planteado
en este estudio.
Notas:
(*) El autor desea agradecer a las
siguientes
personas por su invaluable apoyo para la realización de este trabajo.
Al profesor Rosental Alves por sus apoyo y guía, a Ning Lin del
Latin American Network Information Center (http://www.lanic.utexas.edu)
por el apoyo en recursos informáticos, a María Stoopen por
su temible pluma, y al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología
de México por el apoyo fiananciero.
(1) Ante la constante aparición
de diarios
latinoamericanos en línea, es difícil dar una cifra concreta
de su número. El directorio de periódicos electrónicos
de Editor & Publisher ( http://www.mediainfo.com/ephome/npaper/nphtm/online.htm),
por mucho el más completo disponible en la Web, cuenta con 99
publicaciones
periódicas en América Latina. Según nuestros
cálculos
a la fecha existen cerca de 150 diarios latinoamericanos con presencia
en la World Wide Web.
(2) La única excepción
fue Prensa
Latina que por las condiciones particulares del periodismo cubano y la
evolución de Internet en la isla consideramos apropiado
incluir.
(3) Esta y las otras traducciones son
mías.
Bibliografía
American Society of Newspaper Editors (1994). Come the
Millennium:
Interviews on the Shape of Our Future. Kansas City: Andrews and McMeel.
Dizard, Jr. W. (1994) Old Media/New Media: Mass Communication in
the Information Age. New York: Longman Publishing.
Font, J.L. (1996, April/June). "La Prensa Latinoamericana en
Internet"
. The Latin American Press on Internet. Pulso del Periodismo, 7-12.
Gordon, A.C. (1995). "Journalism and the Internet". Media Studies
Journal 9(2). pp. 173-176.
Hickey, N. (1995). "Revolution in Cyberia". Columbia
Journalism Review
34 (4), pp. 40-47.
Moeller, P. (1995). "The Digitized Newsroom". American Journalism
Review 17 (2), 42-47.
Morton, J. (1996). "Exploring the Cyberspace Future".
American Journalism
Review 18(2), p. 60.
Reddick, R. & Elliot, K (1995). The Online Journalist: Using
the Internet and Other Electronic Resources. Fort Worth, TX: Harcourt
Brace.
Silva Palácios, M. y Machado Gonçalves, E. (1997).
Manual
de Jornalismo na Internet: Conceitos, Noções Práticas
e um Guia Comentado das Principais Publicações
Jornalísticas
Digitais Brasileiras e Internacionais. Departamento de
Comunicación
de la Facultad de Comunicación de la Universidad Federal de Bahia.
Salvador, Brasil. En imprenta.
Straubhaar, J. and LaRose, R. (1996). Communications Media in the
Information Society. Belmont, CA: Wadsworth.
Waisbord S. (1997). What´s the (online) news? Digital
dailies
in Latin America. Manuscript submited for publication.